Por: Administrador

Masivas movilizaciones a nivel nacional e internacional reclamaron la inocencia del expresidente Álvaro Uribe Vélez el pasado 7 de agosto. El evento generó un debate polarizado en el país.

El 7 de agosto, Colombia y diversas ciudades del mundo fueron escenario de marchas a favor del expresidente Álvaro Uribe Vélez. Los manifestantes exigieron la anulación de las investigaciones en su contra y rechazaron lo que consideran una persecución política. La convocatoria generó una alta participación, mostrando la polarización política en el país.

Las marchas, convocadas principalmente por sectores conservadores y uribistas, reunieron a miles de personas. Se observó una importante presencia de simpatizantes provenientes de diferentes regiones colombianas y la diáspora. Entre los asistentes se encontraban figuras políticas, líderes sociales y ciudadanos comunes, muchos portando pancartas y banderas en apoyo a Uribe.


Aunque se reportaron marchas pacíficas en su mayoría, algunos grupos expresaron su descontento con el sistema judicial colombiano y manifestaron su desconfianza en las instituciones. Las redes sociales fueron el principal canal para la difusión de la convocatoria y posteriormente para la divulgación de imágenes y videos de las manifestaciones.


Las marchas del 7 de agosto reflejan la profunda división política que persiste en Colombia. La polarización en torno a la figura de Álvaro Uribe continúa siendo un factor determinante en el debate público nacional. El impacto a largo plazo de estas manifestaciones en el escenario político y judicial del país aún está por verse. La persistencia de estas movilizaciones evidencia la necesidad de un diálogo más amplio y constructivo sobre los temas de justicia y gobernabilidad en el país.